Chalecos tácticos son esenciales para el personal militar, los agentes del orden y los aficionados a las actividades al aire libre. Pero, ¿te has preguntado alguna vez cómo se fabrican?
El proceso de fabricación de chalecos tácticos es complejo y requiere conocimientos especializados para garantizar una protección adecuada. Implica un diseño cuidadoso, la selección de materiales y un trabajo artesanal preciso.
Veamos entre bastidores cómo creamos chalecos tácticos de alta calidad.
El viaje de un chaleco táctico comienza con un concepto. Nuestro equipo de diseño colabora con expertos del sector y usuarios finales, como personal militar o cuerpos de seguridad. Nos aportan información valiosa sobre las características más importantes.
También nos fijamos en las tendencias del mercado y las necesidades de los usuarios. Esto nos ayuda a diseñar un chaleco que sea práctico y satisfaga sus preferencias.
En primer lugar, creamos los bocetos iniciales del chaleco. Estos bocetos se centran tanto en el aspecto del chaleco (estética) como en su funcionamiento (funcionalidad).
Una vez listos los bocetos, utilizamos avanzados programas informáticos para convertirlos en modelos digitales. Este proceso se denomina modelado digital. El modelado digital nos permite ver el chaleco en 3D en una pantalla de ordenador.
Esto es útil porque garantiza que todos los detalles sean correctos. Podemos comprobar si todas las piezas encajan perfectamente y si el chaleco será cómodo de llevar. Este paso nos ayuda a encontrar y solucionar cualquier problema de diseño antes de empezar a fabricar el chaleco.
Selección de materiales
Los chalecos tácticos deben ser duraderos, ligeros y cómodos.
La elección de los materiales es fundamental para su rendimiento. He aquí las principales capas y materiales utilizados:
- Carcasa exterior: Es la capa más externa del chaleco. Suele estar confeccionada con un tejido duradero y resistente al agua, como el nailon o el algodón. Cordura. Estos materiales son muy resistentes y pueden soportar entornos duros y una manipulación brusca. También ofrecen cierta protección contra la humedad, manteniendo secas las capas interiores.
- Paneles balísticos: Constituyen el núcleo del chaleco y están fabricados con fibras de alta resistencia como el Kevlar o el UHMWPE (polietileno de ultra alto peso molecular). El Kevlar es famoso por su capacidad para absorber y dispersar el impacto de las balas, reduciendo el riesgo de penetración. El UHMWPE ofrece una protección similar pero es más ligero, lo que hace que el chaleco sea más cómodo de llevar sin sacrificar la seguridad.
- Acolchado de confort: Esta capa ayuda a distribuir el peso del chaleco y lo hace más cómodo de llevar durante periodos prolongados. Suele consistir en espuma u otros materiales amortiguadores que se adaptan a la forma del cuerpo. Esto reduce los puntos de presión y aumenta la comodidad general.
- Forro de malla: Esta capa interior permite la ventilación y ayuda a mantener fresco al usuario. La malla está estratégicamente colocada para favorecer la circulación del aire, evitando la acumulación de calor y reduciendo el riesgo de sobrecalentamiento durante un uso prolongado. Esto es especialmente importante en climas cálidos o durante una actividad física intensa.
También tenemos en cuenta el uso previsto del chaleco. Por ejemplo, si el chaleco está destinado a entornos difíciles, utilizamos materiales impermeables y resistentes al fuego.
Además, nos abastecemos de materiales de proveedores de confianza con los que llevamos años trabajando. Estos proveedores cumplen nuestras estrictas normas de calidad, lo que garantiza que todos los chalecos que fabricamos son fiables y de alta calidad.

Cortar y dar forma
Una vez que tenemos los materiales, el siguiente paso es el corte. En LQARMY utilizamos tecnología avanzada de corte por láser. Esto garantiza que cada pieza se corte con precisión y uniformidad. El corte por láser nos permite crear diseños intrincados y bordes limpios, que son importantes para armar el chaleco. Cada panel del chaleco se corta siguiendo especificaciones exactas. Esto no sólo reduce el desperdicio de material, sino que también garantiza un ajuste perfecto del chaleco.
Tras el corte, damos forma a las piezas. Utilizamos equipos especializados para dar a los paneles su forma final. Este paso es crucial porque garantiza que el chaleco se adapte al cuerpo del usuario y le proporcione la protección adecuada.

Costura y montaje
A continuación se cosen las piezas cortadas y moldeadas. Nuestros cualificados trabajadores utilizan máquinas de coser industriales para ensamblar los chalecos. Utilizamos hilos resistentes y duraderos para asegurarnos de que las costuras soportan un uso y una tensión intensos. En las zonas de mayor tensión se emplean costuras dobles para aumentar la durabilidad.
Durante el proceso de montaje, añadimos características prácticas como bolsillos, cinchas MOLLE y correas ajustables. Las correas MOLLE son una serie de lazos que permiten a los usuarios acoplar diversas bolsas y accesorios, haciendo que el chaleco sea más versátil. Las correas ajustables ayudan a garantizar que el chaleco se ajuste de forma segura y cómoda a usuarios de diferentes tallas.
Nuestros trabajadores prestan mucha atención a los detalles, asegurándose de que cada puntada sea perfecta y cada componente esté bien sujeto.

Control de calidad
El control de calidad es una parte fundamental de nuestro proceso de fabricación en LQARMY. Aplicamos medidas estrictas. Cada chaleco pasa por múltiples inspecciones en diferentes etapas de la producción.
Comprobamos si hay defectos tanto en los materiales como en la mano de obra. Las inspecciones incluyen comprobaciones visuales de imperfecciones y pruebas de tensión en costuras y correas. También comprobamos la funcionalidad de elementos como cremalleras y hebillas.
Además, comprobamos la durabilidad y el rendimiento de los chalecos. Esto incluye pruebas de resistencia a la abrasión (lo bien que aguanta el chaleco el desgaste), resistencia a la tracción (lo fuertes que son los materiales) y exposición ambiental (cómo aguanta el chaleco en diferentes condiciones meteorológicas).
Sólo se autoriza la venta de los chalecos que superan nuestras rigurosas pruebas. Nuestro compromiso con la calidad garantiza que cada chaleco cumpla o supere los estándares del sector.
Últimos retoques
Antes de empaquetar los chalecos, les damos los toques finales. Esto incluye la colocación de etiquetas y rótulos con información importante como la talla, la composición del material y las instrucciones de cuidado. Si nuestros clientes piden una marca personalizada, también la añadimos.
Cada chaleco se embala cuidadosamente para que llegue en perfectas condiciones. Utilizamos materiales de embalaje protectores para evitar daños durante el transporte. Un embalaje adecuado es esencial para mantener la calidad del chaleco hasta que llegue al cliente.
Confíe en LQARMY para sus chalecos tácticos personalizados
El proceso de fabricación de los chalecos tácticos es complejo y requiere pericia, exquisita artesanía y atención al detalle. Esperamos que esta mirada entre bastidores le haya permitido comprender mejor cómo fabricamos nuestros chalecos tácticos de alta calidad. Cada paso, desde los bocetos iniciales hasta el control de calidad final, es crucial para crear un producto fiable y eficaz.
Por lo tanto, es importante elegir un fabricante fiable y con amplia experiencia.
Con un fuerte enfoque en la producción al por mayor y de fábrica, nos aseguramos de que usted reciba la mejor calidad a precios competitivos. Nuestros más de 15 años de experiencia en el sector garantizan que sus pedidos personalizados se tratarán con la máxima profesionalidad.
Póngase en contacto con nosotros para su próximo pedido al por mayor o solución táctica personalizada.